Resistencia canina a múltiples fármacos: cómo las pruebas de ácidos nucleicos ayudan a permitir la “detección precisa de peligros”

Algunos perros toman medicamentos antiparasitarios sin problemas, mientras que otros desarrollanvómitos y diarreaPuedes darle a tu perro un analgésico según su peso, pero o no tiene efecto o lo deja aletargado. — Esto probablemente esté relacionado con...gen de resistencia a múltiples fármacos (MDR1)en el cuerpo del perro.

Este “regulador invisible” del metabolismo de los fármacos es clave para la seguridad de los medicamentos en las mascotas, yprueba de ácido nucleico del gen MDR1es el método esencial para desbloquear este código.

N.° 1

La clave para la seguridad de los medicamentos: el gen MDR1

640 (1)

Para comprender la importancia del gen MDR1, primero debemos conocer su función principal: actuar como transportador en el metabolismo de los fármacos. El gen MDR1 dirige la síntesis de una sustancia llamada glicoproteína P, que se distribuye principalmente en la superficie de las células del intestino, el hígado y los riñones. Funciona como una estación de transporte de fármacos especializada.

Tras la administración de medicamentos a un perro, la glicoproteína P bombea el exceso de fármaco fuera de las células y lo expulsa a través de las heces o la orina, evitando así su acumulación perjudicial en el organismo. Además, protege órganos vitales como el cerebro y la médula ósea al impedir la penetración excesiva del fármaco que podría causar daños.

Sin embargo, si el gen MDR1 muta, este transportador comienza a funcionar mal. Puede volverse hiperactivo, liberando los fármacos demasiado rápido y provocando una concentración sanguínea insuficiente, lo que reduce considerablemente su eficacia. O bien, puede presentar una función defectuosa, sin eliminar los fármacos a tiempo, lo que causa su acumulación y desencadena efectos secundarios como vómitos o daño hepático y renal.— Por eso los perros pueden reaccionar de forma tan diferente al mismo medicamento.

Lo que es aún más preocupanteLas anomalías del gen MDR1 actúan como «minas terrestres» ocultas, generalmente indetectables hasta que la medicación desencadena el riesgo. Por ejemplo, algunos perros nacen con genes MDR1 defectuosos, y las dosis estándar de antiparasitarios (como la ivermectina) pueden causar ataxia o coma si se administran a una edad temprana. Otros perros con una función MDR1 hiperactiva pueden experimentar un alivio insuficiente del dolor con opioides, incluso con una dosis precisa según su peso. Estos problemas no se deben a «medicamentos inadecuados» ni a «perros poco cooperativos», sino a la influencia de la genética.

En la práctica clínica, muchas mascotas sufren insuficiencia renal aguda o daño neurológico después de tomar medicamentos sin una prueba previa de detección de MDR1, lo que conlleva no solo mayores costos de tratamiento, sino también sufrimiento innecesario para los animales.

N.° 2

Pruebas genéticas para prevenir riesgos relacionados con medicamentos

El análisis de ácidos nucleicos del gen MDR1 canino es fundamental para comprender el estado de funcionamiento de este transportador con antelación. A diferencia de la monitorización tradicional de la concentración en sangre —que requiere extracciones de sangre repetidas tras la administración de medicamentos—, este método analiza directamente el gen MDR1 del perro para determinar si existen mutaciones y de qué tipo son.

La lógica es simple y similar a las pruebas genéticas para la hipertermia maligna, y consta de tres pasos principales:

1. Colección de muestras:

Dado que el gen MDR1 existe en todas las células, solo se necesita una pequeña muestra de sangre o un hisopo bucal.

2. Extracción de ADN:

El laboratorio utiliza reactivos especiales para aislar el ADN del perro de la muestra, eliminando proteínas y otras impurezas para obtener una plantilla genética limpia.

3. Amplificación y análisis por PCR:

Mediante sondas específicas diseñadas para sitios clave de mutación del gen MDR1 (como la mutación canina común nt230[del4]), la PCR amplifica el fragmento del gen diana. Posteriormente, el instrumento detecta las señales fluorescentes de la sonda para determinar el estado de la mutación y su impacto funcional.

Todo el proceso dura entre 1 y 3 horas. Los resultados proporcionan una guía directa para los veterinarios, lo que permite una selección de medicamentos más segura y precisa que la que se obtendría mediante el método de ensayo y error.

N.° 3

Diferencias genéticas innatas, seguridad adquirida de los medicamentos

Los dueños de mascotas pueden preguntarse: ¿Las anomalías del gen MDR1 son congénitas o adquiridas?

Existen dos factores principales, siendo la genética el primordial:

Rasgos genéticos específicos de la raza

Esta es la causa más común. Las tasas de mutación varían ampliamente entre las distintas razas:

  • Collies(incluidos los perros pastores de Shetland y los Border Collies) tienen tasas de mutación nt230[del4] muy altas; alrededor del 70% de los Collies de raza pura portan este defecto.
  • Pastores australianosyPerros pastores ingleses antiguostambién muestran tasas elevadas.
  • Razas comoChihuahuasyCanichesTienen tasas de mutación comparativamente bajas.

Esto significa que, aunque el perro nunca haya tomado medicamentos, las razas de alto riesgo aún pueden portar la mutación.

Medicamentos e influencias ambientales

Si bien el gen MDR1 en sí es innato, el uso prolongado o excesivo de ciertos fármacos puede “activar” una expresión genética anormal.

El uso prolongado de algunosantibióticos(por ejemplo, tetraciclinas) oinmunosupresorespuede provocar una hiperactividad compensatoria de MDR1, imitando la resistencia a los fármacos incluso sin una mutación real.

Ciertos productos químicos ambientales (como los aditivos en productos para mascotas de baja calidad) también pueden afectar indirectamente la estabilidad genética.

640 (1)

El gen MDR1 afecta a un amplio espectro de medicamentos, incluidos antiparasitarios, analgésicos, antibióticos, fármacos quimioterápicos y antiepilépticos. Por ejemplo:

Un Collie portador de este defecto puede sufrir una neurotoxicidad grave incluso con cantidades mínimas de ivermectina.

Los perros con MDR1 hiperactivo pueden requerir dosis ajustadas de medicamentos antimicóticos para enfermedades de la piel para lograr la eficacia adecuada.

Por eso los veterinarios hacen especial hincapié en la importancia de realizar pruebas de detección de MDR1 antes de prescribir medicamentos a razas de alto riesgo.

Para los dueños de mascotas, la prueba de ácido nucleico MDR1 proporciona una doble protección para la seguridad de los medicamentos:

Realizar pruebas tempranas a razas de alto riesgo (por ejemplo, los collies) revela contraindicaciones de medicamentos de por vida y previene intoxicaciones accidentales.

En el caso de perros que requieren medicación a largo plazo (como para el dolor crónico o la epilepsia), se pueden ajustar las dosis con precisión.

Realizar pruebas a perros rescatados o mestizos elimina las incertidumbres sobre los riesgos genéticos.

Es especialmente valioso para perros mayores o aquellos con enfermedades crónicas, que frecuentemente requieren medicación.

N.° 4

Saber de antemano significa una mejor protección

Basándonos en los resultados de las pruebas, aquí presentamos tres recomendaciones de seguridad sobre la medicación:

Las razas de alto riesgo deben tener prioridad en las pruebas.

Los collies, los pastores australianos y razas similares deben someterse a la prueba MDR1 antes de los 3 meses de edad y guardar los resultados en los archivos de su veterinario.

Siempre pregunte a su veterinario sobre la “compatibilidad genética” antes de administrar cualquier medicamento.

Esto es crucial para medicamentos de alto riesgo como los antiparasitarios y los analgésicos. Incluso si la raza de su perro no es de alto riesgo, un historial de reacciones adversas implica que se debe considerar la realización de pruebas genéticas.

Evite automedicarse con múltiples fármacos.

Distintos fármacos pueden competir por los canales de transporte de la glicoproteína P. Incluso los genes MDR1 normales pueden verse saturados, lo que conlleva un desequilibrio metabólico y un mayor riesgo de toxicidad.

El peligro de las mutaciones MDR1 radica en su invisibilidad: ocultas dentro de la secuencia genética, no muestran síntomas hasta que la medicación desencadena repentinamente una crisis.

Las pruebas de ácido nucleico MDR1 funcionan como un detector de minas terrestres de precisión, ayudándonos a comprender con antelación las características del metabolismo de los fármacos en los perros. Al conocer su mecanismo y patrones de herencia, realizar pruebas de detección temprana y usar los medicamentos de forma responsable, podemos garantizar que, cuando nuestras mascotas necesiten tratamiento, reciban una ayuda eficaz evitando los riesgos asociados a la medicación, protegiendo así su salud de la manera más responsable.


Fecha de publicación: 20 de noviembre de 2025
Configuración de privacidad
Gestionar el consentimiento de cookies
Para ofrecerte la mejor experiencia, utilizamos tecnologías como las cookies para almacenar y/o acceder a información de tu dispositivo. Al aceptar estas tecnologías, nos permites procesar datos como tu comportamiento de navegación o identificadores únicos en este sitio. Si no aceptas o retiras tu consentimiento, algunas características y funciones podrían verse afectadas.
✔ Aceptado
✔ Aceptar
Rechazar y cerrar
X